Cómo salir de la trampa de las tarjetas revolving
¿Qué son, qué peligros esconden y cómo reclamar?
Las tarjetas de pago aplazo o revolving son una verdadera trampa para la salud financiera de las personas y de las familias. Un viaje, la reforma de la cocina, un pequeño apuro económico… Son muchas las razones por las que, en ocasiones, necesitamos un dinero extra de forma sencilla y, sobre todo, rápida.
El caldo de cultivo perfecto en el que hacen su aparición las tarjetas revolving, un producto financiero al que ya han recurrido más de 2 millones de personas en nuestro país.
Una fórmula con la que obtener dinero de forma casi inmediata y sin apenas papeleo pero que esconden no pocos peligros: intereses abusivos, desinformación y acoso suelen ser compañeros de este tipo de financiación.
¿Cómo funcionan la tarjetas revolving?
Una tarjeta revolving no es sino un crédito cuyo pago es aplazado; es decir, todas las compras que se paguen a través de la tarjeta se aplazarán con sus correspondientes intereses.
Como el resto de tarjetas de crédito, las tarjetas revolving permiten aplazar el pago de las compras y gastos que se realicen. Lo que las diferencia de las tarjetas convencionales es que, mientras las primeras se pagan a mes vencido, las revolving permiten fraccionar los pagos en varias cuotas y realizar disposiciones como si se tratara de una línea de crédito.
En el caso de pagar de una sola vez el importe que se nos ha prestado, las entidades no suelen cobrar intereses, pero cuando el cliente elige la devolución de ese importe a plazos, se aplican unos intereses tan elevados, que ya han sido calificados de abusivos en numerosas ocasiones por la Justicia, incluyendo sentencias del Tribunal Supremo.
En este sentido, la mayoría de bancos pueden llegar a aplicar unos intereses superiores al 10% TAE. En muchos casos el coste de crédito supera el 20%. Son unos intereses muy elevados que pueden dejar cautivo al consumidor . Así lo ha señalado el Tribunal Supremo a través de una sentencia contra Wizink, en la que calificaba como usura una tarjeta revolving de esta entidad a la que se aplicaba un 27% TAE.
¿Cómo saber si tenemos una tarjeta revolving?
De acuerdo con el Banco de España, hasta 14.000 millones de euros se mueven en este país a través de este tipo de producto financiero, presente en casi todos los hogares.
El problema radica en que su comercialización, poco clara en la mayoría de los casos, hace que muchas veces no sepamos que esa tarjeta que nos “hicieron” en un momento, un día en un centro comercial cualquiera, es una tarjeta revolving.
Junto a las de entidades financieras conocidas como Santander, BBVA, Wizink, EVO, Cofidis, Caixabank o Bankinter, existen tarjetas revolving comercializadas por otro tipo de empresas con un nombre comercial más adaptado al tipo de compra realizada. Así, se pueden destacar las de Alcampo, Cepsa, Carrefour, Fnac, Iberia, Eroski, Inditex, Ikea, Leroy Merlín, Renfe o Vodafone, entre muchas otras.
Por ello, desde el despacho de abogados Reclama Por Mí nos dan 5 “pistas” con las que identificar aquellos contratos de tarjetas revolving poco transparentes o usurarios:
- Desinformación en la contratación.
Centros comerciales, hipermercados, gasolineras o grandes almacenes…, existen numerosas empresas y entidades que ofrecen este método de financiación, pero en muy pocas ocasiones informan de las verdaderas consecuencias que supone contratar este producto financiero.
Generalmente la venta se lleva a cabo por un comercial que en muy poco tiempo y con información insuficiente logra la venta.
- Letra ilegible
Muchos contratos están redactados en letra minúscula e imposible de leer. Sobre todo, el apartado referente a las condiciones donde figuran los intereses pactados, comisiones o seguros que hacen ilegible la lectura por parte del consumidor para poder entender lo que está firmando.
- Omisión de información
Existen casos donde no aparece información clave para decidir si contratar o no el crédito.
Por ejemplo, la TAE, concepto financiero que sirve para expresar el interés y el coste real que se pagará por el crédito.
- Aumento de la línea de crédito sin aceptación de los términos
En ocasiones, los afectados aseguran que la entidad aumenta la línea de la tarjeta sin ellos estar de acuerdo. Desconocen los cambios y se dan cuenta más tarde, incluso durante el proceso de la reclamación, si han decidido reclamar.
- Intereses abusivos
Los intereses de estas tarjetas, que se sitúan por encima 20% TAE ya son muy elevados, sin contar las comisiones que surjan durante el contrato.
Puedes reclamar
“Como el dinero está disponible y se paga a final de mes es más fácil utilizar la tarjeta sin pensarlo. Sin embargo, se termina pagando más dinero durante años debido a los elevados intereses, uno de los motivos por el que el afectado decide denunciar”, explican desde Reclama Por Mí, despacho de abogados especialista en reclamaciones de tarjetas revolving y microcréditos.
Por esta razón, acaban sumergidos en espirales de deudas inmensas durante meses, años e incluso décadas. La única solución para que salgan de esa terrible situación es reclamar por las tarjetas revolving, lo que ahora es más viable que nunca.
Porque, como apuntan desde Reclama Por Mí, es posible reclamar una tarjeta revolving ya no solo por los abusivos intereses sino también por la falta de transparencia que caracteriza a las tarjetas revolving, algo con lo que el propio Ministerio de Economía quiere acabar.
Para ello, el Ministerio prepara una nueva normativa que verá la luz en enero de 2021, enfocada tanto a aumentar la transparencia hacia el consumidor como a reforzar los análisis de solvencia de los clientes por parte de las entidades.
Según establecerá la nueva norma, las entidades financieras estarán obligadas a ofrecer más información pre contractual para que el usuario sepa qué es lo que está firmando y visualice su coste o rendimiento en términos de tasa anual equivalente (TAE).
Además, es importante destacar que los afectados que consiguieron saldar su deuda y pudieron finalmente pagar las cuotas aún pueden reclamar ya que estas cláusulas abusivas no prescriben. Es decir, “los afectados que han tenido una tarjeta revolving todavía están a tiempo de denunciar a la empresa que la concedió y llegar a recuperar todo lo pagado de más en concepto de intereses”, apuntan desde Reclama Por Mí.
Si el tema te interesa, ponte en contacto con nosotros, Finanzas Claras y Fáciles, y te daremos orientación en cómo puedes saber si tienes derecho a recuperar los intereses abusivos. O ponte en contacto directamente con Reclama Por Mi, de nuestra parte.
Nuestro mail: contacto@finanzasclarasyfaciles.com
Nuestro teléfono y WhastApp: +34 625 32 35 35